Análisis Funcional de la Conducta en los Problemas de Conducta Juveniles
Para entender cómo se mantienen estas conductas, podemos aplicar el modelo ABC (Antecedente – Conducta – Consecuencia):
Componente |
Ejemplo de evitación en un joven con ansiedad escolar |
Antecedente |
Pensamiento: «Si voy a clase, me preguntarán y me pondré en ridículo». |
Conducta |
No ir al colegio, quedarse en casa jugando videojuegos. |
Consecuencia |
Alivio momentáneo de la ansiedad (refuerzo negativo), pero refuerzo de la conducta de evitación. |
Ciclo problemático: Como la ansiedad baja al evitar la situación, el joven aprende que la mejor manera de lidiar con su malestar es seguir evitando. A largo plazo, esto genera más problemas académicos, familiares y emocionales.
Otros ejemplos comunes de este patrón en jóvenes incluyen:
Consumo de alcohol o drogas → Para evitar ansiedad o emociones difíciles.
Agresividad → Para evitar sentimientos de vulnerabilidad.
Aislamiento social → Para evitar el miedo al rechazo o la presión social.
Cómo intervenir: Rompiendo el ciclo de la evitación experiencial
Desde la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) y la Terapia Dialéctico-Conductual (DBT), la clave no es eliminar el malestar, sino ayudar a los jóvenes a relacionarse de manera diferente con sus pensamientos y emociones, sin que estas dicten su conducta.
Estrategias desde la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT)
✔ Aumento de la conciencia emocional: Ayudarles a identificar y normalizar sus emociones, en lugar de huir de ellas.
✔ Defusión cognitiva: Aprender a notar los pensamientos sin tomarlos como verdades absolutas. Ejemplo: «Mi mente me dice que no soy suficiente, pero eso no significa que sea cierto».
✔ Exposición gradual a situaciones evitadas: Enfrentar de manera progresiva los contextos que generan ansiedad, sin caer en la evitación.
✔ Clarificación de valores: En lugar de actuar para evitar el malestar, ayudarles a actuar en función de lo que realmente importa en su vida (amistades, crecimiento personal, bienestar).
🔹 Terapia Dialéctico-Conductual (DBT): Un enfoque con evidencia para los problemas de conducta en jóvenes
La DBT (Desarrollada por Marsha Linehan) es una terapia basada en la regulación emocional, especialmente útil para jóvenes con impulsividad, autolesiones, agresividad o problemas de conducta derivados de la evitación experiencial.
Habilidades clave de la DBT para los jóvenes:
🔹 Mindfulness: Aprender a observar sus emociones sin reaccionar impulsivamente.
🔹 Tolerancia al malestar: Enfrentar situaciones difíciles sin recurrir a la evitación o conductas destructivas.
🔹 Regulación emocional: Identificar y gestionar emociones intensas sin sentirse desbordados.
🔹 Habilidades interpersonales: Mejorar la comunicación y aprender a establecer límites sanos.
¿Por qué la DBT es eficaz?
- Tiene evidencia sólida en adolescentes con problemas de conducta, impulsividad y evitación emocional.
- Enseña estrategias prácticas para gestionar emociones y reducir la reactividad.
- Se centra en el equilibrio entre aceptación y cambio, permitiendo que los jóvenes regulen su comportamiento sin invalidar su experiencia emocional.